Alteraciones vasculares con Repercusión en el pie
Síntomas y signos comunes
Dolor: Éste puede estar producido por Claudicación intermitente arterial, que se manifiesta como un dolor intenso en la marcha que desaparece en reposo. Llega a no palparse el pulso periférico en los miembros afectados. El pie puede apreciarse frío y pálido. Ante esta patología no existe lesión neurológica. También el dolor por patología venosaque aparece con varices dolorosas, produciéndose una flebalgia varicosa, así como calambres musculares por dilatación varicosa. Y las peligrosísimas flebitis.
Edema: Este signo se produce por la acumulación anormal de líquido en el espacio intersticial. Y puede tener dos orígenes venoso o linfático.
Venoso: Puede apreciarse un pie pálido, blando, poco doloroso y vespertino que mejora con piernas en alto. Se produce generalmente en el tobillo, en regiones sub y retromaleolares. Con el tiempo se llega a extender por todo el miembro afectado, volviéndose más firme, doloroso, y adquiriendo rubicundez.
Con la evolución suele acompañarse de trastornos de componente línfático, así como morfológicos.de trastornos tróficos y de componente linfático. Aumenta en el transcurso del día, volviéndose duro y sensible. El pie se vuelve cianótico (azulado) por dilatación de venas cerca de los maléolos. Favorecen la aparición de úlceras.
Linfático: Inicio en pie de manera insidiosa. Es pálido, firme, vespertino, al principio, intermitente. No tiene apariencia cianótica, y no es doloroso. Duro a la palpación, escleroso y permanente sin carácter postural. Se localiza en antepié, en dedos y dorso.
Síndrome de Raynaud: Se trata de una alteración vasomotora paroxística precipitada por el frío. Aunque es más común en las manos, también se padece en los pies. Se diferencian tres fases, la fase blanca con sensación de entumecimiento; la fase azul con dolor y parestesia; y la fase roja (hiperemia reactiva) con sensación de escozor y quemazón. Pueden producirse lesiones menores de carácter isquémico.